Marketplace: Las ventajas y los retos de vender por internet
Los marketplaces son una alternativa atractiva para las empresas interesadas en ampliar su mercado, bien sea para líneas de productos específicas o como complemento de su tienda virtual. Para sacarles el máximo provecho es necesario conocer los retos comerciales y logísticos que generan.
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8 MinutosFEBRERO/ 29 /2024
Los marketplace son plataformas digitales que reúnen a diferentes vendedores que ofertan productos y servicios en una gran tienda de tiendas, muy similar a un centro comercial. Por ello, son una alternativa muy atractiva para los emprendedores y también para empresas que buscan ampliar mercados porque el posicionamiento de este tipo de centro comercial virtual atrae a muchos potenciales clientes. Conozca cómo sacarles provecho para incrementar sus ventas.
Tabla de contenido:
Existen diferentes tipos de marketplaces
Marketplaces: ¿solución ideal o reto comercial?
Logística: ¡asunto solucionado!
Existen diferentes tipos de marketplace
Los marketplace representan oportunidades para empresarios y emprendedores porque les brindan una vitrina comercial digital y la infraestructura que necesitan para realizar ventas a través de ese canal, además los acompañan en el proceso de solucionar sus retos comerciales, ya que tienen un objetivo común: vender más.
Aunque algunos negocios ya han evidenciado los beneficios de este canal, muchos otros aún no han dado el salto hacia él. Álvaro Umaña, gerente de Asuntos Corporativos de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico (CCCE), lo atribuye a un desconocimiento de este modelo o a la preferencia por las tiendas virtuales propias. Por eso, es importante que tanto emprendedores como empresarios conozcan sus bondades y su funcionamiento para sumarse a la ola de vender por internet. Para empezar, es clave aclarar los tipos de marketplaces disponibles, que son básicamente los abiertos, que albergan gran variedad de oferta, y los especializados por vertical o cluster económico que se denominan cerrados.
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Así son los marketplace abiertos
Son aquellos donde cualquier persona puede registrarse y vender. Por ejemplo, Mercado Libre o Amazon.
Los requisitos y procesos de ingreso dependen de cada uno, pero normalmente revisan que los productos o servicios sean lícitos, que su venta esté permitida en cada país y en el marketplace, y que cumplan con estándares de calidad.
Además, solicitan información básica y comercial del vendedor como datos de contacto, datos fiscales y cuenta bancaria donde se recibirán los pagos. El vendedor debe conocer y aceptar la política de tarifas o comisiones y decidir si contará con el proveedor logístico del marketplace o con el suyo propio (si puede elegir).
Así son los marketplace cerrados
Son los dedicados a vender productos de una región o categoría específica, como Bazzarbog de la Cámara de Comercio de Bogotá. Los empresarios deben pasar por un proceso previo de selección antes de convertirse en vendedores.
La diferencia con los marketplace abiertos radica en que en los cerrados, los empresarios son más un tipo de proveedores de una marca sombrilla. Estas plataformas exigen documentos como el registro ante la Cámara de Comercio que demuestren que la empresa está legalmente constituida.
Así mismo, verifican que los productos cumplan con sus criterios y que, si son importados, por ejemplo, se cuente con las partidas arancelarias, declaraciones de importación, pago de impuestos, etc.
Los marketplace, igualmente, pueden clasificarse según otros criterios. Existen los B2C, dedicados a la venta de negocio a personas, y los B2B, enfocados en las ventas a otros negocios. “En Colombia, específicamente, el modelo más común es B2C, pero en el mundo el B2B es más relevante. Esto da cuenta de cómo los modelos B2B tienen gran potencial de crecimiento”, explica el experto.
Marketplaces: ¿solución ideal o reto comercial?
La principal ventaja de estar en un marketplace es que brindan una solución completa a los emprendedores y empresarios: les ofrecen una vitrina comercial y transaccional, ponen a su disposición las pasarelas de pago y el servicio posventa. Adicionalmente, como ya tienen presencia en internet, han construido una reputación y tienen un público cautivo que lo visita con frecuencia buscando productos o servicios en la red.
Sin embargo, existen dos aspectos que los vendedores no deben descuidar si quieren apalancarse en estas plataformas, según el gerente de asuntos corporativos de la CCCE. Estos son:
Los costos de venta:
Las empresas suelen tener una visión idealizada de los marketplaces. Creen que solo es necesario subir fotos de sus productos o servicios con las descripciones, y se olvidan de que estas plataformas cobran comisiones por venta a cambio de servirles como vitrina comercial.
Por eso, es clave que incluyan en su plan de negocios las comisiones y retenciones a las que se verán expuestos ya sea por parte del marketplace, las pasarelas de pago o los operadores logísticos con el fin de determinar cuáles serán sus rentabilidades y excedentes reales.
Mercadeo digital:
Los marketplaces no facilitan la personalización, es decir que no permiten que los vendedores usen su propia imagen, sino que deben ajustarse a la identidad de marca de la plataforma. Adicionalmente, los marketplaces tienen el control sobre los datos de los clientes.
Por lo tanto, al hacer una venta no se pueden ejecutar tácticas de remarketing y se dificulta el seguimiento al cliente en la postventa. Por otro lado, los clientes están expuestos a la oferta de la competencia, ya que las plataformas les dan información sobre productos o servicios similares que es fácilmente comparable.
En ese sentido, la tarea de los vendedores es fortalecer la estrategia comercial para que, en medio de una oferta tan variada, su marca resalte.
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Logística: ¡asunto solucionado!
Finalmente, quienes deseen vender a través de un marketplace deben contemplar el aspecto logístico porque en él reside gran parte de la satisfacción del cliente. De poco sirve ofrecer un producto ganador si no llega a tiempo o lo hace en condiciones que varían con respecto a lo ofertado. Pero ¿quién está a cargo de este proceso, es el vendedor o es el marketplace? En realidad existen varias modalidades:
Algunos marketplaces recogen los productos en la sede o domicilio del vendedor o cuentan con aliados logísticos que los reciben en sus puntos de acopio cuando se ha realizado la venta. Luego lo distribuyen al cliente.
Otros marketplace tienen sus propias centrales de acopio de productos de todos los vendedores. Ahí realizan una gestión de inventarios eficiente, exacta y en tiempo real. Cuando el producto es vendido, lo empacan y lo despachan bajo la modalidad más apropiada según el destino.