Siga estos 5 pasos para implementar la evaluación 360 grados a sus empleados
Cuando pensamos en un giro de 360 grados, erróneamente asumimos que es una vuelta radical que desembocará en algo opuesto. Pero no, un giro de 360º básicamente nos deja en la misma posición de partida. Sin embargo, en recursos humanos, una evaluación 360 grados es un instrumento que se aplica a los colaboradores de manera periódica para medir su desempeño, sus competencias y tomar un plan de acción con base en los resultados, y que, además, implica la intervención tanto de los jefes del evaluado, como de sus clientes internos y externos.
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5 MinutosCapacitar sin evaluar es como leer sin imaginar. Por eso es muy importante que sus empleados pasen periódicamente por una evaluación de desempeño, para que fortalezcan sus competencias laborales y se solidifique su participación en la empresa. La evaluación 360 es una evaluación integral que da una perspectiva amplia de las capacidades de un empleado y sirve para emprender un plan de acción con el fin de optimizar su gestión; además, les da la oportunidad a los mandos medios y altos de tener una panorámica de cómo los ven sus colaboradores. En resumen, este tipo de evaluación permite medir, entre otras cosas, las competencias, el desempeño y crear estrategias de desarrollo personal.
ASÍ FUNCIONA LA EVALUACIÓN 360 GRADOS:
Para aprender a caminar, primero hay que gatear. Los empleados no solo necesitan que los evalúen por una simple formalidad o por cumplir con requisitos establecidos por una empresa. También hay intereses personales de por medio, como, por ejemplo, su crecimiento laboral, el descubrimiento de nuevas competencias y el deseo de superar sus propias expectativas en un cargo. Así que no tema evaluar y hacer seguimiento con el método de evaluación 360 grados.
Siga estos 5 pasos y lleve a sus colaboradores al siguiente nivel:
Cuénteles a sus empleados de manera formal que tiene planeado hacer una evaluación de desempeño con la intención de emprender un plan de desarrollo individual con base en los resultados que obtenga. Emplee un discurso que sensibilice a los colaboradores, explicando las ventajas que traerá para los dos lados este tipo de evaluación.
Es natural que sienta temor por la reacción de sus empleados cuando les diga que va iniciar un plan de evaluación, pero si siguió el punto 1 de este manual al pie de la letra, sus empleados van a apreciar que usted como líder se interese por el crecimiento individual. Así que no dé ni un paso atrás y envíe los formatos de valoración en los que incluya los criterios más relevantes para la operación de su pyme (trabajo en equipo, adaptabilidad, flexibilidad, compromiso, orientación a los resultados, atención al cliente).
Cuando haya recolectado todos los resultados de la evaluación, tabule las respuestas y haga un análisis de lo hallado. Tenga en cuenta que para que pueda visibilizar los resultados de una mejor manera, puede hacer uso de gráficas y tablas. Organice la información y revise el alcance que tuvo para poder implementar los planes de mejora individuales.
De nada sirve una evaluación si no hace una retroalimentación oportuna de los resultados. Para que el evaluado no sienta que perdió el tiempo, infórmele los resultados de manera confidencial y hágale saber que va a emprender un plan de desarrollo para potenciar sus capacidades y fortalecer las posibles debilidades que encontró en el informe. Recuerde que de la manera como transmita el resultado dependerá que la evaluación tenga éxito.
Analice los resultados de cada empleado y prepare un plan de crecimiento o fortalecimiento para que logre potenciar las cualidades que detectó. Haga planes de capacitación grupal e individual y entrenamientos en las áreas en las que cree que debe profundizar para procurar el crecimiento tanto de su empleado como de su empresa.
Ahora bien, no solo se trata de poner en marcha un plan de evaluación o de hacer sentir en peligro la permanencia del empleado en la empresa; la utilidad de la evaluación 360 grados radica en que aumenta la motivación de los empleados, mide su potencial y hace más sencillo emprender un plan de crecimiento. Así mismo, la evaluación 360 grados detecta competencias que no se habían podido exponer desde el principio y representa una herramienta ideal para dar un feedback que identifique oportunidades para ambos.