Su empresa aporta al crecimiento y desarrollo del campo (y usted no lo sabía)

A todo el país le conviene que el campo esté bien. Que los actores tengan la maquinaría y los recursos necesarios, que las condiciones climáticas sean óptimas para ellos y que tengan el apoyo económico del estado termina beneficiando a toda la población.

Actualmente, el sector agro aporta alrededor del 7% del PIB nacional y se espera que en el 2018 el PIB agropecuario crezca 2,4%, según la proyección de Anif. Para lograrlo es necesario que se acelere la creación de vías secundarias y terciarias, se mejoren los derechos sobre la tierra, se realicen proyectos de innovación en el sector y se cuente con la participación y el compromiso de muchos grupos. Incluidas las pymes que tienen relación directa con el sector. El problema es que muchas de ellas desconocen que hacen parte de este o no entienden cómo impactan en el crecimiento empresarial del país.

A diferencia de lo que muchas personas aún creen, el sector agropecuario no solo se compone de los productores primarios, es decir, aquellos que cultivan la tierra, recogen la cosecha o crían el ganado. Es mucho más robusto. Si esas personas no tienen el apoyo de otros que transporten, transformen o comercialicen sus productos, la cadena de producción quedaría nula.

Por ejemplo, si usted traslada el ganado del productor nato de una finca a otro punto, su negocio está dando apoyo al agro. O si usted tiene un restaurante donde vende jugos y compra la fruta directamente a quien la cosecha, su pyme es transformadora. En estos dos escenarios, su pyme hace parte del sector agro porque impacta directamente en la eficiencia de la cadena de valor generando un desarrollo y un crecimiento que beneficia a todos los actores.

Y por ser parte de este segmento y participar activamente en el cumplimiento de una cadena productiva puede acceder a líneas de crédito en condiciones de fomento, a través de recursos de su banco o redescontados de Finagro. ¿Qué significa esto?

En el país existe Finagro, fondo para el Financiamiento del Sector Agropecuario, el cual promueve el desarrollo del sector rural con instrumentos de financiación. Lo que hace es otorgar recursos a las entidades financieras para que éstas le den créditos a los actores del segmento agro, siempre y cuando sean destinados a proyectos productivos.

Entonces, los negocios que hacen parte de este ecosistema pueden solicitar a los bancos préstamos en condición de fomento, con los cuales obtendrán mejores tasas de interés, acompañamiento a sus iniciativas de innovación, productos que se acomoden a su ciclo productivo y beneficios para sus aliados en la cadena de producción.

Bajo este escenario, si cada vez más pymes entienden que su naturaleza les permite acceder a este tipo de financiamiento, no solo contribuirán a optimizar su operación y trabajo diario, también mejorarán la relación con otros actores del sector y, lo más importante, aportarán significativamente al desarrollo del campo. Y, por ende, a la economía de Colombia.